De entre la multitud de canteras que jalonan el territorio de la antigua Tarraco (actual Tarragona), la de El Mèdol destaca por su extensión, su especial configuración (en profundidad) y su elemento más característico, el pináculo central conocido como L’Agulla. Su papel como principal suministradora de material lapídeo para la ciudad, así como su importancia dentro de su conjunto patrimonial, han sido reconocidos con su declaración como Monumento Artístico-Histórico, BIC, BCIN y Patrimonio Mundial por la Unesco. En agosto de 2010, un incendio puso en evidencia un nuevo sector de explotación hasta entonces desconocido, y en 2013 Abertis impulsó un proyecto de rehabilitación y musealización que incluyó también un estudio arqueológico dirigido por el ICAC. Además de puntuales intervenciones arqueológicas distribuidas en puntos de especial interés, este proyecto incluyó la documentación detallada de todos los frentes, la microtopografía y otros elementos del entorno de la cantera.

Parmi les nombreuses carrières qui parsèment le territoire de l’antique Tarraco (l’actuelle Tarragone), celle de El Mèdol se détache par son extension, sa configuration (en profondeur) et par son élément le plus caractéristique, le bloc témoin situé au centre de la carrière connu sous le nom de L’Agulla (« l’aiguille »). Son rôle comme fournisseur de matériau pour la cité comme son importance au sein de l’ensemble patrimonial ont été reconnus par leur déclaration comme Monument artistico-historique, BIC, BCIN et Patrimoine mondial par l’Unesco. En août 2010, un incendie a mis en évidence un nouveau secteur d’exploitation inconnu à ce jour, et en 2013 la société Abertis impulsa un projet de réhabilitation et de muséification qui comportait une étude archéologique dirigée par l’ICAC. Au-delà d’interventions archéologiques ponctuelles ce projet a permis de documenter dans le détail tous les fronts de taille, la micro topographie et divers éléments de l’environnement de la carrière.