Introducción: Según la OMS, la salud se define como "el estado de completo bienestar físico, mental y social, y no únicamente la ausencia de afecciones o enfermedades". Por ello, cada vez son más las personas en busca de prácticas o técnicas complementarias que ayuden a conseguir ese completo estado de bienestar y no únicamente centrarse en paliar signos y síntomas físicos.
El mindfulness o conciencia plena se define como aquel estado de la mente que consiste en estar aquí y ahora, con atención y aceptación. Su práctica ha demostrado enormes beneficios a nivel emocional, mental y físico, logrando un completo bienestar en la persona. Sin embargo, esta práctica es muy desconocida entre la sociedad y los profesionales sanitarios.
Objetivos: Conocer los beneficios o efectos que aporta la práctica de mindfulness para el manejo y prevención de la salud, identificar si resulta ser efectiva e importante para el contexto clínico y dar a conocerla a la sociedad.
Metodología: Revisión de la literatura a través de la consulta de diferentes bases de datos y otros recursos.
Resultados: El mindfulness ha demostrado múltiples beneficios para el manejo y prevención de la salud
tanto a nivel físico (reducción de la presión arterial, aumento de la actividad inmune, etc.), emocional y mental (reducción del estrés, síntomas psicológicos, ansiedad, depresión, mejora de la regulación emocional, aumento del afecto positivo, etc.).
Conclusiones: La práctica de mindfulness puede ser utilizada en múltiples contextos clínicos, así pues, puede ser una herramienta esencial para llevar a cabo en la práctica clínica diaria, independientemente del servicio o unidad donde se trabaje.
Palabras clave: Mindfulness, atención plena, salud, impacto sobre la salud, resultado del tratamiento, efectos, beneficios, saludable, salud individual, población no-clínica, meditación mindfulness y bienestar. |