El ruido cultural o vibración ambiental se genera por el hombre debido a la maquinaria industrial, por el tráfico de vehículos, por el viento, por cambios en presión atmosférica, por actividad volcánica interna, etcétera, y se utiliza para determinar características dinámicas de suelos y estructuras entre otras aplicaciones. Las pruebas de víbración ambiental tienen la ventaja de ser eficientes, rápidas y de bajo coste. La información lograda permite mejorar el proceso de construcción de modelos matemáticos de sistemas dinámicos realizando un ajuste de sus parámetros de tal manera que se establezca la mejor correlación posible entre las respuestas predichas por el modelo y las obtenidas experimentalmente. La frecuencia natural o su inverso, el periodo propio, es de entre las características dinámicas, el parámetro más importante para la estimación de las condiciones físicas de las estructuras. En la ciudad de Barcelona se está realizando un estudio para determinar los periodos propios de los edificios utilizando vibración ambiental como fuente de excitación. En este trabajo se presentan los resultados obtenidos al realizar mediciones durante tres etapas de la construcción de un edificio mixto, de hormigón armado y acero, de ocho niveles. Se busca determinar la influencia de los elementos no estructurales analizando el comportamiento del periodo propio. Los resultados preliminares muestran que el periodo disminuye a medida que se incorporan elementos no estructurales al edificio, indicando un aumento de su rigidez.