El turismo cultural es una de las más importantes actividades económicas en el mundo y representa el 10% del PIB mundial. En Europa es muy común encontrar una gran cantidad de edificios, iglesias y estructuras con características importantes en términos de valores históricos y culturales que se deben transferir a las generaciones futuras como una evidencia del pasado civilizaciones. Por las razones antes dicho y por una sensibilidad cultural es muy importante para preservar el patrimonio artístico-histórico. Con el fin de asegurar un buen estado de conservación es posible identificar diferentes grados de intervención en las estructuras.