Abstract:
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Este proyecto de final de carrera trata una problemática existente en los coches de nueva
generación del Grupo VW. A raíz de la implantación de la soldadura láser en la unión del
techo a los flancos laterales del coche, desapareció la posibilidad de fijar una baca
portaequipajes directamente a la estructura de la carrocería. Así pues, actualmente la única
posibilidad de instalación es fijarla mediante una garra al canto de dichos flancos laterales.
Los esfuerzos que ejerce dicha garra sobre el flanco, son tales que pueden llegar a
deformarlo, en algunos casos, cruzando la frontera entre el límite elástico y el límite
plástico. Ello repercute negativamente en la apariencia externa del coche y genera una
sensación de fragilidad que debe ser solventada. El hecho de que cada modelo de coche
sea diferente geométricamente al resto, implica una solución para cada modelo. En este
proyecto se busca valorar la posibilidad de dar con una solución estandarizable y
funcionalmente apta, si no a todos, al mayor número posible de modelos.
Para comenzar a trabajar en este proyecto se toma como base la estructura del SEAT Ibiza
(año 2008), ya que siendo éste un coche actualmente en fase de producción es
relativamente fácil dar con los elementos necesarios para trabajar y experimentar. El
desarrollo del proyecto consta también de un estudio de Benchmark para poder ver las
diferentes soluciones que hoy en día emplean tanto las marcas de la competencia cómo las
principales marcas pertenecientes al Grupo VW (Audi, SEAT, Skoda y VW).
Tras proponer una o más soluciones geométricas se tratará de comprobar que éstas sean
funcionalmente aptas (evitan deformaciones o reducen las existentes), son aplicables a
más modelos, son industrializables, son instalables en una línea de ensamblaje de forma
automatizada y su viabilidad económica. |