Con las sucesivas y recientes reformas de la Compilación del Derecho Civil de Cataluña, y con lo que ello implica de importante desarrollo, y no sólo conservación y reforma, se pone de relieve muy a las claras, la loable voluntad y la legítima aspiración del legislador catalán de seguir avanzando por el camino de la plenitud jurídica autónoma. En estas Jornadas de Tossa de Mar es objeto de especial estudio y consideración una materia tan importante en la esfera del derecho privado, como es el Derecho de obligaciones, dentro de los límites obviamente que señala la Constitución de 1978, como Comunidad Autónoma con Derecho civil propio. Tal aspiración a la plenitud legislativa autónoma que se evidencia desde que entró en vigor el Estatuto de Autonomía de Cataluña, en cambio y lamentablemente, nos parece que falta todavía en el legislador aragonés, no ciertamente en sus declaraciones programáticas, pero si en la realidad parlamentaria concreta, o al menos son excesivamente tímidos, cuando no indecisos, inseguros y hasta contradictorios los pasos que se dan en tal dirección