Abstract:
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A lo largo del siglo XIX, y también en las primeras décadas del XX, se produce en España una lenta pero profunda mutación cultural. En aquella época los libros, por primera vez, dejaron de ser un producto exclusivamente dirigido a las élites y consumido especialmente por éstas y experimentaron un proceso de popularización creciente. No sólo se publicaron muchos más libros que antes, y con tiradas cada vez mayores, sino que además éstos empezaron a ser usados por gentes de escasos recursos económicos y somera formación intelectual. Las progresivas reformas del sistema educativo, auspiciadas por la burguesía desde su llegada al poder político, fueron sin duda la principal causa de este cambio. Durante el ochocientos, aunque con contradicciones
y retrocesos que son reflejo de la debilidad y escaso entusiasmo revolucionario de la burguesía española, se aceptó la intervención estatal en la organización de las enseñanzas, se adoptaron medidas administrativas tendentes a homogeneizar el sistema educativo, se unificaron los planes de estudio de los diferentes niveles, y sobre todo, se hizo un considerable esfuerzo para extender la escolarización y los rudimentos de una cultura moderna al mayor número posible de ciudadanos. |